Paseando por el término de Vallibona

EMILI FONOLLOSA

El término municipal de Vallibona, en la comarca de Els Ports, con una variedad paisajística de gran interés para los amantes de la naturaleza, es un rincón de la provincia ideal para realizar largas caminatas, según se desprende de las numerosas rutas para senderistas con que cuenta. Hay posibilidad de realizar rutas de todo tipo para mantener el cuerpo en forma y disfrutar de esta zona a la que cada día acuden más visitantes.

 La ruta principal es el Gran Recorrido 7 (GR-7), totalmente señalizada, pero hay muchas otras no tan conocidas por falta de señalización y ser más cortas como la Font del Quinto, Molí Rico, Turmell, Mas de la Punta..., según contaba Manuel Serret Jovaní, quien hace de guía para los que quieran explorar estos terrenos. El GR-7 llega a Vallibona procediendo de Fredes, después de dirige a Ares y de ahí, hasta el ermitorio de Sant Joan de Penyagolosa. Una ruta "clásica" es la que tiene como meta el monte Turmell, el más alto de la zona. Se inicia en el santuario de Vallivana, por el barranco del Marfullà, llega a la cima y después se baja en dirección a Vallibona, donde finaliza, esta ruta la hacen muchos valencianos, es larga, cinco horas y media y el camino está bastante maltrecho. Los GR se marcan en las rocas y árboles con dos rayas, una roja y otra blanca. Los PR (Pequeños Recorridos) en amarillo y blanco y las Rutas Verdes, de color verde. 

"El que quiere hacer cualquier ruta, ya se preocupa de encontrar a quien le informe, no es conveniente tenerlas muy marcadas, a veces esto es peor porque hay que gente que no respeta el medio natural, no tiene conciencia de lo que es la naturaleza y produce destrozos". Aún así, Serret cree que no estaría de más que desde la Administración se hiciera algo por fomentar estas rutas, con una mínima señalización y realizando algo de limpieza, "ya que en algunos casos, se hace difícil circular por ellas". A lo largo y ancho de las tierras vallibonenses, que conforman uno de los términos más grandes de Castellón, se puede disfrutar caminando de una flora y fauna muy rica. "Puedes ver cabrás hispánicas, buitres leonados y hay una gran variedad de pinos, robles... según qué lugares, parece que estés en un bosque atlántico, más que mediterráneo". Serret no es propiamente un "guía profesional", "yo hago estas rutas acompañando más que nada a amigos, les voy explicando algo de todo lo que vamos viendo, conozco a la perfección esta comarca". 

BUENA PREPARACIÓN 

La duración de una ruta oscila entre cuatro y cinco horas. Hay que tener una mínima preparación física, saber un poco cómo orientarse e ir bien equipado: mochila, bastón, unas buenas botas que protejan bien los pies, "y sobre todo salir muy pronto, por la mañana". "Yo tengo cinco bastones, según que ruta hago, elijo uno u otro" decía Serret. Vallibona conserva entre sus tradiciones una larga caminata como es la peregrinación a la población turolense de Pena-roja de Tastavins con la que está ligada por lazos históricos que arranca del siglo XIV. En alguna ocasión se ha hablado de señalizar este camino, porque el paisaje del que se disfruta es impresionante, según coincidían todos los que fueron de Vallibona a Pena-roja en la última romería. En los últimos años, es costumbre que en las fiestas de agosto, en Vallibona se incluya una marcha a pie, como el año pasado que se marchó hasta el río de les Corces (en anteriores años, los destinos fueron el Turmell y les Roques). También algunos acuden a pie a las ermitas de Santo Domingo y Santa Águeda.